
El hipotiroidismo es una de las condiciones más comunes que trato en mi consulta. Esta afección ocurre cuando la glándula tiroides no produce suficientes hormonas, lo que puede afectar el metabolismo y generar síntomas como fatiga, aumento de peso, piel seca, intolerancia al frío y cambios en el estado de ánimo. Mi enfoque es realizar un diagnóstico preciso, basado en síntomas, antecedentes clínicos y pruebas de laboratorio, para diseñar un tratamiento personalizado que ayude a restablecer el equilibrio hormonal y mejorar la calidad de vida de mis pacientes.
Cada persona experimenta el hipotiroidismo de manera diferente, por lo que el tratamiento debe ajustarse a sus necesidades específicas. Trabajo de la mano con mis pacientes para encontrar la dosis adecuada de terapia de reemplazo hormonal y les brindo acompañamiento en aspectos clave como la alimentación y el bienestar emocional. Con un manejo integral, es posible reducir los síntomas y recuperar la energía y vitalidad.